EL EXCESO DE VELOCIDAD PUEDE PROVOCAR LESIONES

Los conductores de Carolina del Sur suelen reconocer que cosas como conducir ebrio, mirar el móvil al volante o conducir con somnolencia son peligrosas. Sin embargo, con un énfasis social en ir del punto A al punto B lo más rápido posible, ¿piensa la gente lo mismo sobre el exceso de velocidad? Según los estudios, no.

El exceso de velocidad es un problema grave que poca gente se toma en serio. Esto significa que aunque usted sea un conductor seguro que respeta el límite de velocidad establecido, los conductores negligentes siguen poniéndole en peligro.

El exceso de velocidad es mortal

Según la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte, más de 112.500 personas murieron en colisiones relacionadas con la velocidad en un periodo de nueve años. Incluso cuando las víctimas sobreviven, las colisiones a alta velocidad aumentan drásticamente la gravedad de las lesiones. Los conductores con exceso de velocidad también tienen más probabilidades de provocar un accidente que los que respetan el límite de velocidad.

La realidad de estas cifras puede tener más sentido si se compara con las muertes por conducción relacionadas con el alcohol. Durante el mismo periodo de nueve años del estudio de la NTSB, las muertes relacionadas con la velocidad supusieron un tercio de todas las muertes de tráfico documentadas. Aproximadamente el mismo número de personas murieron en colisiones relacionadas con la conducción bajo los efectos del alcohol.

Aumentar los límites de velocidad empeora las cosas

Algunas personas sostienen que los estados deberían aumentar los límites de velocidad para ajustarlos al flujo de tráfico observado. Es decir, si el límite de velocidad es de 70 millas por hora, pero la mayoría de los conductores circulan a 80 mph o más, creen que el límite de velocidad legal debería subir a 80 mph. Creen que esto animará a todos los conductores a viajar a mayor velocidad y hará que todo el mundo esté más seguro.

Por desgracia, esto no funciona como la mayoría de la gente espera. Cuando aumentan los límites de velocidad, los conductores que ya los superaban empiezan a conducir aún más rápido. Así, en una interestatal donde el límite de velocidad es de 130 km/h, es fácil encontrar conductores que circulan a velocidades superiores a los 145 km/h.

¿Cuáles son algunas soluciones?

Como conductor seguro, usted ya conduce con precaución y respeta el límite de velocidad, pero ¿qué ocurre con los demás conductores? Es de los otros conductores de quienes hay que cuidarse. Los grupos de seguridad animan a la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico por Carretera a desarrollar mejores precauciones y campañas de concienciación, pero por lo demás nadie está haciendo gran cosa para atajar la raíz del problema: los conductores negligentes.

Si se ha visto implicado en un accidente relacionado con la velocidad y ha sobrevivido, probablemente esté un largo camino hacia la recuperación. Desde el dolor físico y el sufrimiento hasta el trauma emocional y la avalancha de facturas médicas, recuperarse no es fácil. Sin embargo, la compensación puede ayudar a aliviar este viaje, y muchas víctimas en Carolina del Sur optan por utilizar las demandas por lesiones personales en la búsqueda de un recurso legal.